Aunque no le demos mucha importancia, el estado de tus uñas nos pueden revelar el estado general de tu salud. Descubre cómo evitar que se quiebren y qué dicen de tu nutrición.
Generalmente hay señales de un problema cuando tus uñas crecen muy poco, tienen un menor espesor en el recubrimiento (son muy delgadas), son frágiles, tienen manchas blancas o coloraciones amarillas.
Muchos de estos síntomas pueden ser efectos secundarios de una mala nutrición, anemia, problemas hormonales en la tiroides, la menopausia o dietas poco balanceadas. Por lo tanto, siempre es importante visitar a nuestro médico de confianza.
Te compartimos algunos tips para evitar que tus uñas se quiebren con frecuencia:
- Evitar la sequedad: cuando las manos están muy resecas las uñas son más propensas a quebrarse.
- Diminuir el manicure: el uso excesivo de limas, pulidos, barnices, esmaltes y quitaesmaltes debilitan tus uñas.
- Uñas artificales: a diferencia de su gran popularidad, evita usar uñas artificiales y endurecedores de uñas, sólo ocultan el problema de fondo, siendo una solución temporal.
- No uses tus uñas como herramientas: Si necesitas abrir latas, desprender etiquetas, stickers o raspar algo, utiliza la herramienta adecuada, no tus uñas.
- Suplemento vitamínico diario: Los minerales como el selenio y el zinc son fundamentales para las uñas saludables, al igual que la botina y vitaminas del complejo B. Todos incluidos en Perfectil.
